jueves, 15 de agosto de 2013

Supongo que nunca leerás esto. Que esta vez la razón venció a las ganas. Que los textos dildonicos ya no están de moda, y que con ellos ya no te vuelves a ganar a nadie. Aun así, yo necesito escribir todo esto. Necesito desahogarme, sacar todo a fuera volver a empezar de cero. La gente que dice estar enamorada y desenamorarse en medio segundo no merece que nadie se enamore de ellos. Me siguen haciendo gracia los bipolares, que tan pronto darían la vida por ti, y al rato deciden que es mejor dejarlo todo, que no vas a llegar a ninguna parte. No sirve de nada decir que vas a esperar a una persona, si luego no le demuestras ni siquiera un mínimo de cariño cuando mas lo necesita. Que si me he molestado en decirte lo de despedirme de ti tantas veces, es porque realmente quería hacerlo, lo necesitaba. Pero supongo que nunca hay segundas oportunidades, al menos para mi, nunca las ha habido, o puede que yo nunca las haya dejado aparecer. El caso es que no me sirve que me esperes si luego no me demuestras que vas a seguir ahí. Si yo tiro todo por la borda por estar contigo, ¿es tanto pedir que me des un poco de ti?

No hay comentarios: